Hace unos meses recibí un mail de un lector con unos comentarios, dudas y preguntas que llevó a un intercambio interesante. Los dos opinamos que merece la pena publicarlo así que aquí está. Lo he editado un poco, eliminando las partes personales que no tendrán interés para terceros y además, me he permitido el lujo de tunear algunas partes que, al volver a leerlos unos meses más tarde, me parecían no del todo claros.
——————-
Primer mail:
Hola Simon,
Me gustaría tratar el tema de las personas a las que su Uso les ha llevado a un cambio en su estructura permanente pero no irreparable. Me voy a explicar: distingo dos tipos de tono muscular: el neurológico y el mecánico.
Tono neurológico: se origina el sistema nervioso central. Depende del animal que se es (en este caso humano), y del aprendizaje de los movimientos básicos. Este tono está siempre presente y se modifica en función de cada movimiento (la variación de tono se produce incluso antes de que desde el exterior se perciba el movimiento en sí). A este tono le afectan muchas variables, entre otras el estado emocional de la persona.
Entiendo que lo que FM llamaba Uso de sí mismo es cómo una persona maneja este tono neurológico.
En cada movimiento, al tono neurológico se le suma unas contracciones musculares que llamamos fásicas (puntuales), y que son las que provocan movimientos de gran amplitud.
Tono mecánico: por el hecho de ser los músculos, tendones y fascias estructuras físico-químicas, están sometidas a las leyes de los cuerpos elásticos. Resulta que ciertas proteínas de los músculos, si están sometidas a contracción permanente por la acción de un Tono Neurológico, cuando cesa este el músculo no recupera la longitud original.
Si un mal Uso de si mismo ha derivado en un Tono Mecánico permanente, aunque se modifique el Uso de sí mismo, la persona tendrá que luchar contra ese Tono Mecánico. ¿Quién ganará?…
Creo que disolver ese Tono Mecánico es un paso previo antes de recibir clases de TA. Es cierto que si el Tono Mecánico no está muy exacerbado, puede que con las clases y un nuevo Uso, se recupere todo el rango de movilidad, pero creo que estos son los casos más raros.
Las personas con un Tono Mecánico instalado en su cuerpo permanentemente, desde el punto de vista médico no tienen ninguna patología, por lo tanto llegan a la clase de TA con la ilusión de poder mejorar el Uso de sí mismo, cosa que a veces no se produce.
Respuesta:
Hola:
El Uso abarca mucho más que lo que denomines ‘tono neurológico’. Es el manejo de todo: el sostén postural y el movimiento. Incluye también las decisiones que tomamos, nuestra forma de reaccionar, etc. Lo que denomines ‘tono mecánico permanente’ es un efecto, en este caso perjudicial, del uso sobre el funcionamiento y, en último lugar, la estructura del cuerpo. La Técnica Alexander propone dar la vuelta a esta situación: mejorar el funcionamiento, y la estructura, por medio de un ‘uso’ adecuado de uno mismo.
Así que, aunque lo que comentas sobre la longitud de los músculos es correcto, la práctica de la Técnica Alexander ayuda recuperar la longitud natural de los músculos para que vuelvan a funcionar dentro de unos límites adecuados y puedan volver a su longitud ‘de descanso’ cuando sea apropiado. Esto se consigue, en resumen, por medio de alargar toda la estructura.
La tensión crónica y acortamiento de la musculatura de movimiento se debe en gran parte a un sostén postural inadecuado. Esta falta hace que unos músculos realicen un sobre-esfuerzo para compensar la falta de trabajo adecuado de otros. Esta compensación es, a la larga, muy perjudicial, y pueda llevar al tipo de situación que describes.
El sostén postural es la tarea primaria del sistema muscular. Hay que conseguir el equilibrio del todo antes de poder mover este todo o alguna parte de ello respecto a otra de forma harmoniosa. Por este motivo, el primer paso para mejorar el funcionamiento general es recuperar un sostén postural adecuado. Antes de conseguirlo, es muy difícil soltar la tensión perjudicial de los músculos de movimiento porque están involucrados, necesariamente, en el equilibrio del todo. Es decir, esta tensión no deseada es necesaria para que uno no se cae, debido a que los músculos apropiados no están cumpliendo con su función. Por este motivo, lo mejor que cualquier intento directo de quitar esta tensión pueda conseguir es un alivio temporal. En seguida, todo vuelve a cómo estaba o simplemente se mueve el desequilibrio de un sitio a otro.
Recuperar un sostén postural adecuado no es tarea fácil ni mucho menos algo que se pueda conseguir de forma instantánea. Esta dificultad se debe mecanismo de homeostasis: la tendencia del cuerpo a mantener un equilibrio entre elementos independientes, o sea, la tendencia del cuerpo de no cambiar. Esto es una ventaja cuando las cosas marchan bien y obviamente un obstáculo cuando no. Este obstáculo no es infranqueable, pero para conseguir un cambio, hace falta constancia y paciencia. El desequilibrio no se produce de la noche a la mañana, y la recuperación tampoco.
Deja una respuesta