Como es bastante evidente, el español no es mi lengua materna. Cuando llegué a España no hablaba ni jota de ello. Además del reto del idioma, se añade el hecho de que fui un profesor recién graduado. No obstante, después de un tiempo, empezaba a tener la sensación de qué me estaba explicando bien, ¡y en español! Fue una gran decepción cuando muchos de mis alumnos me hacían preguntas o comentarios, en la misma clase o más tarde, que demostraba que no me habían entendido nada, o peor aún, ¡habían entendido lo contrario de lo que había dicho!
Me preguntaba si era un problema de idioma o simplemente que yo me explicaba mal. Pensándolo bien, me acordaba de que me había pasado lo mismo cuando daba clase en Australia y en Inglaterra, y de hecho, había observado lo mismo con los alumnos de mi profesora cuando yo trabajaba como su ayudante. Así que, si no problemas de idioma, el profesor se explica bien, y el alumno no es tonto, ¿cómo se explica esta enigma? [Más…]